River salió silbado del Monumental. Riestra dio el golpe con un triunfo histórico
El equipo de Marcelo Gallardo atraviesa su peor momento en más de una década. Con la derrota ante Riestra por 2-1 en casa, River sumó su cuarta caída consecutiva y quedó envuelto en una crisis que crece dentro y fuera del campo.
River Plate no encuentra el rumbo. Tras la dolorosa eliminación en la Copa Libertadores frente a Palmeiras, el equipo de Marcelo Gallardo volvió a tropezar en el torneo local y cayó como local ante Deportivo Riestra por 2-1. La derrota —la cuarta al hilo— no solo agudiza una crisis futbolística que parecía improbable meses atrás, sino que también deja al Millonario en una posición incómoda en la tabla y bajo una creciente presión por parte de sus hinchas.
Un Monumental impaciente y una caída dolorosa
El estadio Monumental fue testigo de una noche cargada de frustración. Desde el arranque del encuentro, la impaciencia de la gente se hizo sentir en cada pase errado y cada ataque sin profundidad. Y el golpe llegó temprano: a los 11 minutos del primer tiempo, Antony Alonso abrió el marcador para Riestra, sorprendiendo a propios y extraños.
River reaccionó con un gol de Giuliano Galoppo a los 24, pero no le alcanzó. En el segundo tiempo, Pedro Ramírez volvió a desnivelar para el Malevo y decretó el 2-1 definitivo, pese a los intentos desesperados del equipo de Gallardo por alcanzar el empate.
Riestra, de promesa a realidad
El triunfo del conjunto de Gustavo Benítez es, sin lugar a dudas, el más importante en su historia. No solo por el rival ni por el escenario, sino porque le permite consolidarse como líder de la Zona B del Torneo Clausura, con 22 puntos y una ventaja de cuatro sobre River, su inmediato perseguidor.
Además, Riestra escaló en la tabla anual y se ubicó en zona de clasificación a la Copa Libertadores, apenas por debajo de Rosario Central, River, Argentinos Juniors y Boca. “Salimos con el cuchillo entre los dientes”, dijo Pablo Monje, una de las figuras del partido.
El ciclo Gallardo en su hora más baja
Marcelo Gallardo atraviesa su momento más crítico desde que asumió en River. La eliminación copera, la caída ante Atlético Tucumán, y ahora esta seguidilla de derrotas —que no sufría desde 2010— sembraron dudas sobre la continuidad de su proyecto, al menos en el corto plazo.
La expulsión de Maximiliano Salas por protestar al juez de línea y los reiterados errores defensivos son síntomas de un equipo desbordado, que no logra sostener la identidad que lo convirtió en protagonista absoluto del fútbol argentino en la última década.
Lo que viene: Racing y Central, más presión
River enfrentará el jueves a Racing en Rosario por los cuartos de final de la Copa Argentina, en un duelo clave para recomponer la imagen. Luego, por el Clausura, visitará a Rosario Central en un partido de alto voltaje por el contexto y las urgencias.
Mientras tanto, Riestra recibirá a Vélez con la ilusión intacta y la convicción de que este presente no es casualidad.
