Tensión. Senado aprueba leyes, Milei promete veto
El Senado de la Nación marcó un fuerte contrapunto con el Poder Ejecutivo al aprobar por amplia mayoría, e incluso unanimidad en algunos puntos clave, una serie de leyes de gran impacto social, incluyendo la declaración de emergencia para la discapacidad y mejoras en las jubilaciones.
Estas decisiones, que también contemplaron revertir un veto presidencial para un fondo de reconstrucción en Bahía Blanca, anticipan un nuevo capítulo de tensión política con el presidente Javier Milei, quien ya adelantó su intención de vetar las medidas y calificó de “traidora” a la vicepresidenta Victoria Villarruel por haber habilitado el debate.
La Ley de Emergencia para la Discapacidad, que recibió 55 votos a favor y ninguno en contra, busca garantizar presupuesto y pensiones hasta 2027, con el fin de saldar deudas y mejorar los pagos a prestadores de servicios como enfermeros, acompañantes y transportistas, quienes llevan meses sin cobrar. Además, la norma exige mayor eficiencia en la aprobación de pensiones –se otorgaron solo 586 de 500.000 solicitudes en los últimos 14 meses– y una actualización de los montos para jubilados y trabajadores con discapacidad en talleres asistidos.
En simultáneo, el Senado impulsó una recomposición previsional con un aumento del 7,2% para jubilados y pensiones, más un bono que se ajustará por inflación, y revirtió con 51 votos a favor el veto presidencial al fondo especial de $200.000 millones para la reconstrucción de Bahía Blanca tras la tragedia de marzo.
La jornada en el Congreso reflejó un fuerte alineamiento de la oposición, sumando el apoyo de senadores radicales y provinciales, que lograron consolidar un quórum robusto y avanzar con una agenda alternativa a la Casa Rosada. Sin embargo, la respuesta del presidente Javier Milei no se hizo esperar: el mandatario confirmó que vetará las leyes aprobadas, expresando su profundo malestar con la votación y apuntando directamente contra la vicepresidenta Villarruel por su rol en la sesión.
Este escenario de confrontación, con el Ejecutivo dispuesto a judicializar las medidas si los vetos caen, intensifica la grieta política a medida que se acercan las elecciones de octubre, dejando en el centro de la disputa el rol del Congreso frente a las políticas de austeridad del gobierno